miércoles, 31 de octubre de 2018


Géneros, Paternidad y ProgrESO


Cada día no pocos papás divorciados nos desayunamos en este país un revuelto de tertulianos radiofónicos o televisivos con las más dispares opiniones de toda índole, ya sean políticas, sobre el cambio climático o el sexo de las gallinas, mientras esperamos un rayo de luz que ilumine nuestro futuro y el de nuestros pequeños. Si es por la tarde, pongas el magazine que pongas (si tienes estomago suficiente) igualmente encontrarás las más dispares opiniones sobre todo tipo de asuntos del corazón, el último reallity de cocina o la vida íntima de fulano de tal. Gentes variopintas que discuten, muchas veces de manera airada sobre los más dispares asuntos. Ahora bien, todos los días, todos estos programas, tertulias, informativos, etc del más multiflorido pelaje llegan al momento en el que se habla de ESO.



Y ESO es algo, místico, mágico, algo que de manera asombrosa consigue alinear a todas estas gentes de orígenes tan ajenos los unos de los otros. ESO barre de un plumazo cualquier resquicio de discrepancia porque si apareces en los medios y no eres religiosamente afín a ESO, dejaras de ser, al menos en la esfera periodística. El poder de ESO es de ese que no hace falta mencionar, porque todos saben cuándo hay que aplicar la autocensura, todos conocen muy bien cuál es el dogma a repetir cuando de ESO se habla o se escribe. ESO es el nuevo Dios.

ESO ordena entre otras muchas cosas que las mujeres deben destacar, triunfar en el trabajo, sobresalir en la vida social, procrear (con o sin pareja que total para que queremos un padre), ser atractivas pero no perdonar a quien así lo perciba.. etc, etc.. 

Pues si después de semejante hercúleo compendio de tareas, su vida de pareja se ve subsumida por el retrete y procede separarse, deben también ostentar los cuidados de la prole y para ello si es menester, vilipendiar al excónyuge de colgantes atributos. Tienen derecho a privar a su prole de la compañía, el afecto o el cariño de sus progenitores masculinos si con esto se garantizan un estatus socioeconómico ventajoso y si para ello hay que reducirse la jornada, hágase!. 

ESO ha decidido que para la mejor perpetuación de este modelo, se debe proceder a exprimir cual bayeta Villeda a esos varones díscolos que deciden tratar de ejercer su paternidad de forma responsable después de divorciarse o ser divorciados por la causa.. la que sea. No importa en absoluto la necesidad que los niños tengan de sus padres, convertidos en visitadores siempre bajo la escrutante lupa del dogma. ¡No se pase Ud!, ¿No osará intentar educar a sus niños? ¡Usted de visita! ..y si se porta bien dejaremos que vea a su hijo el día de su cumpleaños. El primer día de cole está vetado por la fe de ESO para estos papás, que se pasan la vida mendigando favores para robar un minuto al régimen de visitas. Algunos desarrollan una creatividad desmedida..

Hay múltiples organismos guardianes de la Fe de ESO, con muchos y sesudos funcionarios que, eso si cobran religiosamente de la subvención o del estamento público correspondiente, porque ESO mueve mucha pasta. También ocurre que la separación de poderes ha sido engullida. ESO exige que no se juzgue de igual manera a todas las personas, sino que se haga dependiendo de los atributos con los que nacen. Las fuerzas del orden publico tienen el deber de perseguir a todo aquel varón que sea señalado y lo retienen hasta que se demuestre su inocencia por ejemplo. Los periodistas inventan eufemismos como el del “suicidio ampliado” para amansar conciencias potencialmente díscolas.

Sorprende sobremanera descubrir como los más religiosos fieles a ESO, son precisamente aquellos que tradicionalmente han exhibido orgullosos su ateísmo. Su cuestionamiento de cualquier dogma impuesto, viniese de donde viniese. Los partidos políticos y organizaciones sociales que un día tuvieron vocación transformadora, ahora cuando de ESO se trata, cierran filas cual masa aforme, borreguil e incapaz de crítica alguna, porque la nueva fe de ESO, por supuesto no se cuestiona. Bueno a veces algunos antiguos aguerridos militantes, bajito, bajito, en privado confiesan sus dudas, incluso los más valientes te dicen al oído que no comulgan con ESO, pero claro el miedo a la inquisición, al rechazo lo puede todo, el miedo a la purga..

Bienvenidos al ProgrESO.

CCI

lunes, 15 de octubre de 2018

"Tengo los martes y los jueves, un vuelco en el corazón"


Así empezaba un pasodoble de la comparsa gaditana de Tino Tovar, "La canción de Cadiz". La copla reflejaba muchas de las escenas habituales del padre separado español: "y aunque sea de 5 a 7, ya con eso me das la vida"; "llevo la incertidumbre de verte tan poco, seré "pa'ti" yo importante".



El pasodoble relata todas las dudas y los miedos de ese padre separado, ese padre que vive alejado de sus hijos, que no sabe si sus hijos le tendrán como figura paterna o simplemente lo verán como el que viene a recogerle dos tardes a la semana o un fin de semana alterno. Los miedos por no saber como explicarle que tu ausencia no es deseada, que quisieras pasar más tiempo con ellos, que echas de menos las cosas más cotidianas como desayunar juntos o leerles un cuento antes de dormir pero que no puedes.

Cuando una pareja con hijos se rompe, se crean dos núcleos familiares en casi todos los países. Así tras el divorcio la familia queda divida en: papá y su núcleo familiar por un lado y mamá y su núcleo familiar por el otro. Los hijos viven con ambos, comparten su día a día con ambos y viven con normalidad en ir unos días con papá y otros con mamá. Ya sea con mamá y su nueva pareja o mamá sola y viceversa. En España esto es una quimera. Por un lado tenemos al núcleo familiar de mamá con los niños (y nueva pareja o no) y papá que o bien vive sólo o con la nueva pareja o bien ha tenido que volver a casa de los abuelos por motivos económicos. Mamá disfruta de los niños todos los días menos un par de tardes o una tarde y un fin de semana de cada dos. El padre sin embargo pasa de una vida familiar con pareja e hijos a vivir en soledad. No sólo acaba tu relación de pareja sino que también tu rol como padre. Pasas de cenar cada día con tus hijos (desayunar, comer, merendar depende del horario laboral) a cenar sólo. Vuelves al domicilio que deja de ser hogar (porque quién lo hacía hogar era la sonrisa de esos críos que ya no están) y todo lo que tienes es una casa vacía (si la conservas), llena de recuerdos, fotos desperdigadas por aquí y por allá, los pocos juguetes que dejaron en algún cajón de Ikea.

Estudios psicológicos admiten que los hombres tardan 5 años en pasar el "duelo" por el divorcio o separación. Obviamente las estadísticas no son matemáticas puras y cada persona es un mundo. Pero bien es cierto que el hombre tarda más en recuperarse. Primero de todo porque, en muchas ocasiones, pierde bastantes de las amistades comunes (que suelen tomar partido hacia la madre), pierdes la confianza en ti mismo (tienes miedo a volver a intentarlo y que te vuelva  a pasar lo mismo), pero sobre todo sientes que estas trabajando día a día para nada: otra persona esta criando a tus hijos, los arropa cada noche. En algunos casos el duelo es mayor, ya que  la madre rehace su vida y tienes que ver como otro hombre es el que disfruta del tiempo que a ti se te es negado y se encarga de hacer lo que tu no puedes: educarles.

Muchas veces centramos el tema de la separación desde la perspectiva más materialista: el padre pierde la casa, tiene que pagar hipoteca, tiene que pagar manutención. Pero nos olvidamos de la vertiente sentimental. El padre pasa de vivir 365 días con los hijos (pases menos o más tiempo con ellos debido a tu trabajo) a vivir 121 días (si tienes suerte de tenerles cada fin de semana, que muchos padres ni siquiera tienen eso y porque los periodos de vacaciones si se aplica un régimen parecido a la compartida y eso infla la estadística). Nadie piensa que se ha de hacer un calculo y dividir al hijo en 182,5 días para cada uno. Los hijos no son un coche que puedas tener en renta o una vivienda en multipropiedad que hoy la tienes tu y la semana que viene ella. Los hijos son personas que ustedes dos decidieron tener en conjunto, porque ambos pensaron que la otra persona era la más adecuada para ello y que no tienen nada que ver en vuestra separación: "Se divorcian los padres, no los hijos", debería estar escrito en un cartel de neón en muchos juzgados de familia, porque a muchos y muchas se les olvida.

Pero volvamos a esa situación paterna. El padre tiene dos tardes a la semana y en dos tardes debe repartir su tiempo con el resto de la familia, porque esos niños también tienen abuelos, tíos, primos que también quieren verles y tú tienes que agarrar tu diminuto pedazo de pastel y partirlo en trozos más pequeños. Tienes dos tardes o un sábado y domingo para estar con ellos. Y te asaltan las dudas de como actuar en según que situaciones, que decirles si te preguntan porque no les puedes ver más.

Tienes poco tiempo para poder educarles o ponerles normas y más si en casa de mamá no las tienen. La cosa es más difícil cuando los niños son más pequeños. Muchas veces tienes 3 horas y ese niño se duerme la siesta (muy necesaria a ciertas edades) y al final sólo tienes tiempo de pasar un rato y correr para entregarle en hora.

Por eso, desde esta plataforma luchamos y abogamos por la Custodia Compartida. Porque no podemos borrar al padre de la foto (porque sientes que te han borrado de ella y que sólo estás para pagar la manutención a primeros de mes), porque es derecho de los hijos criarse con su padre, pero también es derecho y deber de un padre el estar con esos hijos, educarles, disfrutar de esa infancia que es una estrella fugaz: pasa volando y cuando menos te lo esperas tu hijo tiene 20 años y eres un desconocido para él.

Luchemos por el futuro de esos niños y no por arrebatar a miles de padres su función, su deber, su derecho y su mayor alegría: los hijos.

Porque como rezaba otro pasodoble de "Pa religión la mía" de Los Molina de Chiclana: "Que aunque no me puedas ver, lleva siempre por bandera a ese que no te puede a ti abrazar, no te puede besar, ni está a tu vera..... Lleva tu foto aquí en la cartera".

J.J. - CCI


jueves, 4 de octubre de 2018

ACTO CUSTODIA PATERNA EN LA UNIVERSIDAD EUROPEA DE MADRID

Ayer asistimos al acto del X aniversario de CP y las reuniones de apoyo a padres que esta asociación realiza cada lunes. En el acto intervinieron el presidente y varios padres de la asociación así como miembros de la Universidad y distintas asociaciones y colectivos vinculados a la reivindicación de la Custodia Compartida. 


Como cierre el acto contó con la inestimable aportación del magistrado Angel Luis Campo Izquierdo.

En resumen, un acto emotivo, interesante y enriquecedor. Nuestra enhorabuena a los  compañeros de CP.