Reproducimos esta interesante noticia de actualidad publicada en La Gaceta:
El Gobierno por fin trabaja en una ley para la custodia compartida
El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad trabaja ya (por fin) en un borrador de ley para establecer la custodia compartida como el régimen habitual en los casos de divorcio.
La ministra Dolors Montserrat ha señalado que “no se trata de imponer la custodia compartida, sino de normalizar el recurso a la misma y que este recurso exista en todo el territorio nacional, facilitando el trato cotidiano y frecuente de los niños con sus progenitores”
También ha dicho que se “comprometen” a normalizar este tipo de custodia siempre que no medien casos de violencia machista, algo que es perfecto. Lo que no han dicho es qué sucederá en casos de violencia contra los hombres o cuando medien denuncias falsas por maltrato…
En el año 2005 se incluyó en la legislación española la custodia compartida, lo que permite que los niños pasen, en teoría, el mismo tiempo con los dos progenitores tras su separación. Desde entonces, las parejas que tras un divorcio han solicitado la guarda compartida, han pasado del 2% al 25%, según los últimos datos publicados por el INE.
Este incremento, sin duda positivo, se debe en parte a la proliferación de leyes autonómicas en torno a la custodia compartida, lo que nos ha llevado a contar con cinco leyes diferentes que han llevado a que los porcentajes entre provincias sean realmente dispares.
A la cabeza se sitúa Cataluña, donde cuatro de cada diez parejas la solicitan al divorciarse. En el otro extremo está Extremadura, donde sólo recurren a la crianza compartida el 8% de los padres.
Entre medias hay porcentajes muy distintos: desde el 38% de Baleares o el 36% de Valencia, al 17% de Madrid o el 16% de Andalucía y Galicia. Coincide, además, que, salvo Baleares, las comunidades autónomas con legislación propia son las que cuentan con una cifra mayor. Se da también que estas regiones presentaban un porcentaje más alto aún antes de disponer de una normativa propia.
¿Debería esto llevarnos a impulsar una ley de ámbito nacional? Por supuesto que sí. De hecho, ya es algo que el Partido Popular contempló en la última legislatura y que fue imposible llevar a buen puerto ante la falta de apoyos.
De nuevo según el INE, en 2015 la custodia de los hijos menores de edad fue otorgada a la madre en el 69,9% de los casos, una cifra que en 2014 estaba en el 73,1%.
Este sigue siendo un punto de fricción importante a la hora de legislar a nivel nacional, ya que partidos como el PSOE consideran que imponer por ley la guarda compartida podría perjudicar a los hijos, sobre todo si esta no se ha llevado a cabo de manera igualitaria durante el matrimonio.
Parece claro que no habría que demonizar a ninguno de los padres por su sexo, y parece claro que la legislación actual sigue favoreciendo a las mujeres a la hora de quedarse con los hijos tras un divorcio.
Si se logra el consenso político suficiente, dejando de lado ideologías y creencias, podremos conseguir una ley igualitaria y que piense realmente en el beneficio de los niños. Cada cuatro minutos se rompe una pareja en España y lo que no tiene demasiado sentido es que el futuro de sus hijos sea radicalmente distinto en función de la comunidad autónoma en la que residan.
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